Hay perfumes que no pasan de moda, sobre todo, en épocas como la estival. Fragancias que transmiten un recuerdo, un sueño, un viaje y que siempre están ahí. Cada aroma se asocia a una persona y, además, hay algunos que tienen tanto éxito que siguen en los primeros puestos de venta. Seguro que, de buenas a primeras, te vienen a la cabeza un montón de perfumes clásicos ideales para este verano. Te recordamos algunos:
Noa de Cacharel. Su inconfundible frasco circular y transparente y su fragancia de flores blancas y notas verdes recuerdan a esos veranos de atardeceres infinitos. Este perfume se lanzó en 1998 y se ha coronado como un aroma que huele a limpio casual y elegante a la vez. Combina 15 ingredientes en un conjunto armónico y con mucha personalidad.
Agua Fresca de Rosas de Adolfo Domínguez. Un perfume clásico en verano, se lanzó en 1995. De la familia olfativa Chipre floral, contiene rosa, jazmín, lirio de los valles (muguete), sándalo, musgo de roble y almizcle. Su frescura ayuda a que sea una fragancia perfecta para los días de más calor.
Eau de Rochas. Se trata de un agua tónica gracias a la verbena y a la lima, alegre por la mandarina y las flores frescas de rosas silvestres y el jazmín. Un perfume atemporal cuyo fondo, compuesto por musgo de roble acentuado por ámbar, le aporta un efecto “Chipre” duradero, muy apreciado en los años 70.
DKNY Be Delicious. Este perfume fue lanzado en 2009 por el perfumista Maurice Roucel en un envase que representa una manzana usada como icono de la ciudad de Nueva York. Esta fragancia ha estado durante varios años en los primeros puestos de ventas. Y aún lo está. Es perfecto para mujeres urbanitas y con un brillo especial.
Ralph Lauren. Ralph es perfume que evoca los sueños y la esperanza de que se hagan realidad, de esas promesas que un día se cumplieron. Recuerda el entusiasmo del verano y la confianza en un futuro por construir, lleno de éxitos y posibilidades. De tipo floral, su aroma está compuesto por hojas de manzano verde, mandarina italiana, fresia amarilla, magnolia, fresia morada, musk e iris blanco.
Kenzo Flower. Inspirado para una mujer sensual, su aroma empolvado da un porte y una elegancia a la mujer. Este perfume salió en el año 2000 con la idea de inventar un aroma de una flor que no tiene aroma, la amapola. Un símbolo de paz y armonía, para una mujer fuerte y singular. Entre sus ingredientes se encuentra la Rosa de Bulgaria, la violeta de Parma, casia y espino salvaje.
Le Classique de Jean Paul Gaultier. Dentro de todos estos perfumes clásicos, no puede faltar este, que nació hace casi 20 años. Un innovador aroma de flores especiadas con arranque de notas de jengibre. Entran, a continuación, los acordes cálidos de la flor de azahar, la mandarina, el Ylang-Ylang, el clavel y la orquídea. El lirio le aporta un fondo terroso acentuado por el ámbar, la vainilla y el calor de la madera de cedro y canela.