El perfume es mucho más que un olor agradable en un frasco que vale la pena guardar una vez vacío. La esencia es poderosa y así se ha demostrado a lo largo de la historia con sus múltiples usos.
Pero, precisamente para quedarnos con esa esencia, os ofrecemos cinco beneficios que vienen de la mano de usar un buen perfume 😉
1. Es tu carta de presentación. Al conocer a alguien, antes incluso de estrechar las manos, el olor que desprendas será lo primero que le llegue a la otra persona, junto con la imagen.
2. Identifica tu personalidad. Hoy en día existen infinidad de perfumes y es importante saber elegir el nuestro. Por ejemplo, para personas con espíritu joven, nada mejor que olores cítricos y frescos. Si eres alguien más bien tímido, opta por esencias florales y dulces.
3. Evoca recuerdos. El olor tiene tanta fuerza que es capaz de traer al presente momentos, situaciones e incluso personas del paso. ¿Quién no ha pronunciado alguna vez la frase de: “este olor me recuerda a…”? 🙂
4. Tiene un efecto positivo. De manera inconsciente, el perfume tiene la capacidad de enviar mensajes a nuestro cerebro que ayudan a sentirnos mejor.
5. Incrementa nuestro atractivo sexual. En el juego de la seducción, el aroma es una pieza fundamental. El secreto está en las feromonas; sustancias químicas que potencian la atracción a través de los sentidos.