La celulitis. Maldita celulitis. Muchas mujeres (y también algunos hombres, aunque muchos menos) sufren este problema que, sobre todo, nos suele preocupar por su aspecto estético. En Perfumerías Laguna queremos hablar sobre la celulitis de forma extensa, así que iniciamos hoy un especial sobre ella de la mano de Anne Möller. Lo primero es saber de qué hablamos cuando hablamos de celulitis. Y también los diferentes tipos que existen.
La celulitis, también denominada lipodistrofia, es un aumento y un cambio de estructura del tejido adiposo localizado en la hipodermis, la capa más profunda de la piel. Lo que sucede con la celulitis no es que aumenten el número de adipocitos que forman el tejido adiposo. Lo que realmente ocurre es que éstas celulas aumentan su tamaño. El resultado del proceso que vemos en la imagen de abajo es lo que se conoce como ‘piel naranja’, provocada por la acumulación de líquidos en el tejido conectivo donde están las fibras de colágeno y elastina, que se vuelven más rígidas al quedar atrapadas las venas, las arterias y los vasos linfáticos por el engrosamiento de los adipocitos.
La celulitis se puede clasificar en cuatro tipos, dependiendo de lo avanzada que esté:
En la Fase 1, la piel no presenta deformaciones de ningún tipo pero se aprecia la retención de líquidos.
En la Fase 2, se observan ligeras depresiones. Es lo que se conoce como piel naranja.
En la Fase 3 ya se ven y se palpan deformaciones en forma de nudos con o sin dolor.
En la Fase 4, por último, se observan deformaciones fácilmente perceptibles, abultamientos y plegamientos con dolor.
En los tres primeros casos la celulitis es todavía reversible. En el último de ellos no.
