Hasta ahora, en este repaso a los perfumes más emblemáticos y con más historia, nos hemos centrado en fragancias femeninas. Hoy, entre los clásicos del perfume, rescatamos una fragancia que, como su empresa, desprende aroma a Mediterráneo. Hablamos de Agua Brava, el clásico de Puig.
Corrían los primeros años de la posguerra (1.941) cuando el empresario Antonio Puig Castelló fundó en Barcelona la empresa Puig. 27 años más tarde, en 1.968, llegaba al mercado la más mítica de sus fragancias, Agua Brava. Desde entonces, la multinacional catalana no ha dejado de crecer y marcas como Carolina Herrera, Nina Ricci o Paco Rabanne pertenecen al gigante grupo Puig.
Un año más tarde del lanzamiento de Agua Brava, Puig ponía a la venta Azur de Puig. Estas dos fragancias han sido las más vendidas de la empresa durante décadas. La influencia de Agua Brava en el mercado fue tal que durante veinte años este perfume se convirtió en el patrocinador oficial de la Copa del Rey de Vela que todos los años se celebra en Palma de Mallorca.
Agua Brava es un perfume fresco y marítimo, con notas de salvia, laurel, lavanda, musgo y sándalo. Un perfecto embajador para el Mediterráneo que le vió nacer.